¿Cómo curar el hierro?
CURADO:
El proceso de curado es el primer contacto que tenemos con un utensilio de hierro. Este proceso es muy importante ya que va a proteger la pieza de la corrosión y va a potenciar la anti adherencia del material durante su uso. El uso cotidiano de estos productos asienta el curado que vamos a realizar mejorando la experiencia de cocinar con el pasar de los años.
Elementos necesarios:
· Aceite vegetal o grasa: Recomendamos aceite vegetal o grasa, que nos permite lograr una terminación más oscura sobre el producto.
· Trapo/papel de cocina: Tela 100% de algodón, libre de materiales sintéticos. Absorbe mejor el aceite y resiste altas temperaturas.
· Gancho/pinza: Nos ayudará a manipular el producto mientras permanezca caliente.
· Llama/fuente de calor: Sugerimos curar el hierro sobre el fuego. También podemos hacerlo con un mechero a gas, o un horno
PROCEDIMIENTO DE CURADO:
Preparar: Limpiar la pieza con agua y secar para remover cualquier resto indeseado de la producción. Pintar con una servilleta una fina película de aceite vegetal para curar. Buscamos que ese aceite se queme sobre el hierro para empezar a consolidar el curado.
Quemar: Exponer la pieza boca abajo sobre la llama directa durante 10 minutos. Cuando la superficie de cocción adquiera un tono cobrizo girar con la ayuda de un gancho, y quemar por otros 10 minutos. O hasta notar el hierro ennegrecido.
Repasar: Retirar del fuego y dejar airear unos minutos. Repasar la pieza, todavia caliente, con un trapo para emparejar la terminación. Enfriar y lavar con agua fría sin detergente. Así logramos el primer curado, ahora a mejorarlo con el uso.
1° uso: Las primeras cocciones deberán ayudar y mejorar el proceso realizado anteriormente. Por eso se recomienda evitar cocciones largas o ácidas en primeras instancias. Lo ideal es realizar frituras o saltear vegetales. Repetir el proceso si es necesario.
Segunda opción: Precalentar horno al máximo. Colocar la pieza ya aceitada boca abajo durante 1 hora, o hasta notar la superficie del hierro ennegrecida. Ventilar el espacio para evitar olor a aceite quemado dentro de la cocina.